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viernes, 28 de junio de 2013

Dirección a Mongolia

Se han terminado los días de paz y relax en Olkhon, ahora toca ir a Ulan Bator en Mongolia para luego poder entrar en China.

Desde que deje a Zanet en Irkustk me dí cuenta de la suerte que tuve de ir con ella, porque me acomodé de tal manera teniéndola a ella de traductora  que luego me costó mucho entender y hacerme entender para moverme e ir hacía Mongolia.

En Irkustk, compré el billete para ir a Ulan-Ude y desde allí ir a Ulaan Bator. Solo tenía unos 40 rublos rusos (un euro) y no quería cambiar más monedas rusas ya que creía que llegaría a Mongolia sin tener que cambiar más. Error!!! Fail!!!!

Me quedé durmiendo en la estación de tren sentado en una silla y apoyando mi cabeza a la mochila que la tenía al asiento de al lado, solo salia de la estación para ir a mear y lavarme en el parque de enfrente ya que para ir al lavabo se tenía que pagar y a mi no me llegaba (hay que ahorrar de alguna manera!!).

Por la tarde en la estación me encontré a 2 mujeres y una chica de Reus, me hizo mucha ilusión ya que eran los primeros españoles que me encontré hasta la fecha.

Cogí el tren, había muy mal rollo, la azafata del vagón estaba de una mala leche con unos chicos de Kazakhstan porque llevaban demasiado equipaje, nos cambió de cabina por gracia divina, era una cabina como la llaman ellos cupé, de segunda clase pero en vez de 4 personas eramos 8, hacía un calor que te morías y yo no encontraba la postura para poder dormir (es imposible dormir sentado aguantando el equilibrio).

Llegué a Ulan-Ude y me dijeron que para ir a Mongolia no había billetes de tercera clase (los más baratos), me enteré por un taxista que podía coger un taxi, ir al centro, coger allí un bus hasta Kyatha y luego otro hasta Ulan Bator. Me fui a pie hasta el centro vi que tenía que cambiar dinero que con los 40 rub. no llegaba a ningún sitio, a mediodía cogí un autobús hasta Kyatha y luego el mismo chofer del bus por unos 3 euros me acercaba hasta la frontera y allí a una pareja de ancianos también por unos 3 euros me llevaron hasta el primer pueblo una vez cruzada la frontera, llamado Altan Bulack. Estuvimos en el control ruso unas 3 horas y allí pude conocer a la mujer Mongola (abstenerse de chistes que son muy buena gente) y otra mujer mayor que se subió al coche también, me dí cuenta que eran un encanto de mujeres, el hombre es tubo todo el rato fuera fumando y hablando con sus paisanos, la mujer me dijo... o eso entendí que me invitaba a su casa pero el hombre no quiso. Me dejaron donde tenía que coger el bus el día siguiente, como era tarde busque un sitio donde acampar cerca de la valla de una casa que me cubriera del viento, paso una furgoneta y un chico joven se bajo de ella y me dijo que allí no acampase que a lo mejor la policía me detenía que lo hiciera en su jardín, me quede impresionado de su amabilidad,
cuando ya tenía la tienda montada y cene un poco, me acerque donde estaba el chico que me había invitado a acampar en su jardín que estaba con un amigo suyo cambiando las ruedas de una furgoneta. Me invitaron a beber un poco de cerveza y estuvimos hablando un rato, luego me llevaron con la furgoneta a ver el pueblo, cuando llegamos de nuevo a su casa me dijo que entrase que no iba a dormir fuera y ya mañana cuando cogiera el bus recogía la tienda.

Mongolia o al menos hasta ahora por lo que vi es bastante más pobre que Rusia pero la amabilidad de las 2 mujeres mayores y estos 2 chicos me dejó patidifuso.

Me levanté el día siguiente fui a la parada del bus y allí no había ni dios eran las 7:00 am, me quedé allí hasta las 8 pero nada de nada, volví a la casa del chico desayuné en el jardín para no tener  que despertarlo y a las  10 llamé a la puerta para decirle que había perdido el bus, me invitó a entrar y me puso la tele, él continuo durmiendo, luego llamaron a la puerta era una mujer, me dijo que tenía que currar, yo le dije si le podía ayudar y me fui con ellos a la frontera a cambiar una rueda a una furgoneta y poner 2 neumáticos nuevos sin llanta a otra en el hueco de la rueda de repuesto. Luego volvimos a la casa y había otra furgoneta esperando, estuve todo el día con él canviando neumáticos, sin máquina, solo utilizaban los pies y dos barras de hierro, cuando quitaban y ponían el neumático semi nuevo el compresor  a veces no tenía fuerza y le ponían gasolina al rededor del neumático y le prendían fuego así se el fuego hinchaba la rueda de golpe (eso pegaba un pedo que no veas!!!), la gente que venía eran todos Mongoles y todos trabajaban y se ayudaban mutuamente, gente muy maja. Todos me decían de donde eres? yo les decía de Barcelona y allí empezaba una conversión futbolistica.

Zoaldao, el chico que me invitó me dio  una camisa de fútbol de un equipo local de Ulan Bator y yo le dí una mía que ponía que estaba diseñada en Barcelona y se puso super contento.
Me cocinó un plato típico Mongol llamado zú uan (así es como me sonaba a mi, no tengo ni chorra como se escribe y no quiero buscar en internet como se llama (el tiempo es oro)), estaba muy rico.




Cuando miré la hora para poner la alarma vi que su reloj  marcaba una hora más, me dijo que había una hora de diferencia en Mongolia con respecto a Rusia. Por eso no había bus el día anterior... jajajaja, cosas que me pasan, y en este caso me alegro ya que pase un día muy agradable con el y la gente de ese pueblo que venia a cambiar neumáticos.

1 comentario:

  1. jajaja...lo que no te pase a ti!!!está bien que confíes en la gente, pero ten cuidado!!!te queremos de vuelta de una pieza!!!

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